La Oración de Jesús
Ing. Com. Ángel A. Ledesma G.
De las tradiciones
espirituales meditativas, es una de las más importantes dentro del Cristianismo,
y en particular en la Iglesia Ortodoxa Griega y Rusa.
Su práctica se remonta a los
anacoretas cristianos del desierto del noreste de Egipto y se inicia con San
Antonio, y se transmite a través de grandes maestros como: Evagrio Póntico;
Juan Clímaco; Simeón el Nuevo Teólogo; Gregorio el Sinaíta, Gregorio Palamas y
en tiempos recientes por Calisto e Ignacio Xantoppoulus y Nicodemo el
Hagiorita.
Los grandes centros de
práctica y difusión están en los monasterios coptos cristianos del noreste de
Egipto en el desierto de Nitria cercanos a Alejandría, también el Monasterio
Copto de Santa Catalina en el Sinaí, y el más famoso el Monte Athos en Grecia,
donde está la mayor comunidad de monjes ortodoxos cristianos del mundo que
practican esta oración.
En sus inicios se utilizaba
solamente el nombre de Jesús. En
hebreo Yeshuá es un nombre teóforo
que significa,”Dios salva” o “Salvador”. Prontamente los primeros
cristianos estaban convencidos que el nombre de Jesús tenía poder. En Hechos 4,12 ”Porque no hay bajo el cielo
otro nombre dado a los hombres por el que nosotros debamos salvarnos”. En Filipenses 2,9 -11 “Por eso Dios lo exaltó
y le otorgó el Nombre, que está sobre todo nombre. Para que al nombre de Jesús
toda rodilla se doble en los cielos, en la tierra y en los abismos, y toda lengua
confiese que Cristo Jesús es el Señor para gloria de Dios Padre”.
Praxis de esta oración,
tiene como característica que el devoto se puede sentar en un escabel, con el
tronco erguido, y la cabeza inclinada hacia el Corazón. Las manos puestas sobre
el regazo, con o sin rosario en mano, y cuando observa que la inhalación
ingresa por su nariz, repite con devoción, la primera parte del nombre; “Jeee”, sin mover la lengua ni las
cuerdas vocales. Sintiendo que Jesús viene a su Corazón. Cuando observa que
exhala por la nariz, pronuncia mentalmente “Sus”. Mentalmente el orante va a Jesús. Si tiene el Rosario en mano
este le servirá para contar el número de veces que se ha propuesto repetir el
Santo Nombre de Jesús. Pero si contar lo distrae del propósito de la oración
entonces, no lo utiliza.
En los actuales tiempos la
fórmula que se usa es: Cuando se inhala: “Señor
Jesús Hijo de Dios.” Y cuando se
exhala: “Ten piedad de mí, pecador”.
Esta forma de orar se dice
que está basada en los principios: Hesiquia, silencio, nepsis, noética, Oración
del corazón, incesante, ininterrumpida, debe ser enseñada por un staretz o
maestro de oración. Lleva a la Theosis.
Hesiquia. Cuando observamos la respiración, y repetimos las
fórmulas de esta oración, el espíritu se calma, entra en reposo. Hésychia
en griego significa reposo.
Silencio. La actitud de nuestra mente, es repetir mentalmente
solo la fórmula de oración y desechar cualquier otro pensamiento.
Incesante. Esta oración consiste en
una repetición incesante del nombre de Jesús. Se apoya en las exhortaciones
apostólicas, “Orad sin cesar” I Tes. 5,17). O en los evangelios, “Velad y orad
en todo tiempo” Luc. 21; 36.
Ininterrumpida. La oración de Jesús debe
ser continua, y no interrumpida mientras se está orando. Hay testimonios de los
Padres Espirituales y maestros de oración, que se mantienen en oración día y noche, inclusive cuando duermen, porque es el
Espíritu de Dios, quien mantiene activa la invocación ininterrumpida en la
oración de Jesús”
Nepsis. Vigilancia del Nous o inteligencia del espíritu, a las puertas del corazón, para que cualquier pensamiento ajeno a la oración pueda ser controlado.
Noética. Viene de Noesis. Del griego
que significa: Acto intencional de pensar. En este caso, es una noesis en Dios.
Tiene relación con las palabras, Noein:
Verbo que describe la acción de percepción mental. Noeta: Objeto, inmutable y eterno de esta percepción que es Dios. La
acción intencional de pensar está radicado en el Nous que es la mente
individual y que se aplica también a la mente Universal.
Oración del Corazón. En la tradición cristiana ortodoxa, el corazón
es el asiento del Espíritu del ser humano, y es el lugar de encuentro del
Espíritu de Dios y el espíritu de la criatura. Hay que dirigir la mirada al corazón,
para que los logoi de la mente racional, no perturben la visión del encuentro y
la contemplación que se hace con la mirada purificada del Corazón por la Gracia
Divina.
Staretz o maestro espiritual. Esta tradición insiste que se
aprenda a orar con un monje o practicante que tenga experiencia en la oración
de Jesús.
Deificación o Theosis.
Mediante la oración del corazón, y la iluminación de Dios concedida por su
Gracia Santificante, el ser humano recobra su unidad con Dios. Su conciencia
trasciende la multiplicidad, la división y la dispersión. Vuelve a estar sujeto
el cuerpo al alma, y el alma a Dios. Recobra su unidad original. Se recubre con
la imagen de Dios. Es deificado, theosis en griego, pero esto no es obra del
hombre, sino de la Gracia divina actuando en la criatura.
El ser humano así deificado,
alcanza el estado de éxtasis o unión con Dios, contemplando a Dios en la oración
profunda, lo que se llama en griego, Theoria,
contemplación de Dios. Theo Dios, Oria contemplación. Se
convierte en un Theorikon, el que contempla a Dios.
Al lector que le llame la
atención “La oración de Jesús” es recomendable que adquiera y lea los libros:
“El peregrino Ruso”, “La Filocalia”, “La Oración del Corazón”. Se inspirará y
animará a practicar este hermoso camino de encuentro diario con Dios.
Comentarios
Publicar un comentario