P. Dávila (El hombre, peregrino fuera de Dios)
EL HOMBRE, PEREGRINO FUERA DE DIOS
Cada mortal es un peregrino fuera de Dios,
peregrino que ha de pasar por muchas pruebas,
que ha de enfrentar una dura lucha
contra sus enemigos internos.
Es demasiado el número
de los que sucumben en esta lucha,
de los que naufragan en el mar de la ilusión
en pos de lo efímero.
La noche es larga,
la tempestad, violenta,
las tinieblas y la obscuridad
se vuelven intensas,
sin embargo la Luz Divina
está siempre presente
aunque no la veamos;
Sus destellos se filtran
a través de la obscuridad de la noche.

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