P. Dávila (Somos parte de Dios mismo)

SOMOS PARTE DE DIOS MISMO

 Somos una chispa divina desprendida

-por así decirlo así- de ese Dios mismo.

Una chispa divina, imagen,

semejanza, impronta,

de ese mismo Dios.

Cada uno de nosotros, yo, somos eso,

y estamos también frente a este gran Espíritu, 

a este Infinito Espíritu.

Y quitaría yo la palabra frente

y diría con más precisión:

estamos y están ustedes, estoy yo

como inmersos en ese mar insondable divino.

En Él vivimos, -dice el iniciado Pablo-

en Él nos movemos, en Él somos.

Esto es lo que tenemos que recordar.

Él con nuestro espíritu no está 

circunscrito a lugar alguno.

Nuestro espíritu que encarnó en este cuerpo

no está ubicado en ninguna parte de ese cuerpo...

Nosotros somos como parte de ese Espíritu de Dios,

de la misma naturaleza de Él,

y unidos a Él tenemos absolutamente todos los poderes

y todos los atributos de Él;

separados de Él caemos en el vacío y caemos en la nada...