P. Dávila (Dios y su deseo de manifestarse)
DIOS Y SU DESEO DE MANIFESTARSE
Nuestro Dios Bendito
no es un Ser Replegado en su infinitud
o aislado de su creación.
En cada cosa se manifiesta de alguna manera
como Él sabe manifestarse,
en la quietud, en el silencio,
en la augusta soledad de Sí mismo
siempre abierta a quienes le buscan.
Nuestro Dios Bendito
posee un divino atributo:
Su necesidad de manifestarse.
Los filósofos inventaron ese principio filosófico:
El bien posee en si mismo el hambre de manifestarse.
¿No es Dios el Supremo Bien?
Si esto es así, su deseo y
su poder de manifestación son infinitos...
Comentarios
Publicar un comentario